miércoles, 9 de mayo de 2007

La falta de C O N S T A N C I A como el primero de mis males

Sería fantástico poder decir: "pasen y vean, todos los días una novedad les espera". Pero desde ya adelanto que no va a ser así. La virtud de la constancia, tan implorada por Nietzsche, no me acompaña.

No me comprometo a nada. A lo sumo, a aburrir a algún visitante con escritos quizás demasiado largos para un blog. Me gustaría pensar que no.

Al igual que mi vida, que mi memoria, los textos no van a ir acompasados por el orden cronológico al que parece que nos debiéramos adecuar. El antes y el después no van a tener forma, salvo por el hecho de que en algún momento dado tendrán que ser públicados, no así, haber sido creados.

Cualquier absurdo en estos textos, cualquier sinsentido, se deberá a mi limitación para hacerme entender. Mis más sinceras disculpas.